Sebastián Godínez Rivera

El compañero de fórmula de Donald Trump, J.D Vance, es un senador de Ohio, pero que es desconocido para la mayoría del país. Sin embargo, la apuesta del republicano tiene dos frentes: la conquista electoral de los estados del Medio Oeste, los cuales serán clave de los comicios; y dar paso a una nueva generación de trumpistas.

Desde la Convención Nacional Republicana en la que Vance fue elegido por Trump pronunció un discurso que gustó mucho a los asistentes. En él abordó sus orígenes familiares y profesionales; destacó que fue un hombre de clase trabajadora, que muchas veces no tenía para comer e incluso mencionó que a los habitantes de Wisconsin, Ohio y Michigan tienden a ser vistas como menos; y concluyó con “no olvidaré de donde vengo”.

Los discursos que apelan a las emociones de acuerdo a estudiosos como George Lakoff, Charo Tuscano y Xavier Peytibi destacan la importancia de los discursos que apelen a los sentimientos. Ahora bien, desde finales de los años noventa las democracia han adquirido el tinte de audiencias de acuerdo a Bernard Manin. Este concepto hace referencia a que la gente se ve atraída por los discursos o el personaje que compite, mientras que las propuestas, programas y agendas pasan a un segundo término.

Desde esta perspectiva el candidato a la vicepresidencia cautivó al auditorio y las portadas de los grandes diarios como The New York Times, The Herald, Washington Post por mencionar algunos.  La gente respondió bien a su mensaje, puesto que apela a un sentimiento de discriminación y menosprecio que exige una reivindicación; al revisar la historia norteamericana a lo largo de la segunda mitad del siglo XX y todo el XXI ningún político de Ohio ha llegado a la Casa Blanca, ni a la vicepresidencia.

Los únicos mandatarios de Ohio fueron Ulysses S. Grant, Rutherford B. Hayes, James A. Garfield, Benjamin Harrison, William McKinley, William Howard Taft y Warren G. Si bien, Vance no hizo mención sobre estos presidentes, tiene presente que un oriundo de Ohio en la vicepresidencia daría nuevos aires en la política; no obstante, el sentimentalismo no es a lo único que apuesta. En su discurso habló de los 3 estados que pertenecen a la región de los grandes lagos, los cuales también son entidades péndulos fundamentales para ganar la elección (Ohio, Wisconsin y Michigan).

Estos estados se caracterizan porque en ambos la posibilidad de que gane uno de los dos contendientes los gane y junte los votos necesarios para mantenerse o volver al despacho oval. Lo que hizo Vance fue apelar al voto en estas entidades, en las cuales se encuentra el Rust Belt o el cinturón manufacturero, llamado así porque es la principal zona de empresas que producen acero, automóviles y minería. Esta zona se integra por las ciudades de Buffalo, Chicago, Cincinnati, Cleveland, Detroit, Indianápolis, Jersey City, Kansas City, Minneapolis-Saint Paul, Duluth, Milwaukee, Newark, Pittsburgh, Rochester y San Luis.

El compañero de fórmula habló de sus antecedentes obreros como una forma de apelar también a la superación de las clases bajas. Vance no siempre fue el magnate inversor de riesgos sino que trabajó en fábricas en sus primeros años de vida. Está apelando al voto trabajador que durante la administración Biden ha estado protestando por los bajos salarios a los trabajadores. Incluso Trump se reunió con ellos en marzo, aunado a que en su discurso ha criticado la falta de empleos y que la industria automotriz se ha movido para México lo que pone en desventaja a su país.

La segunda apuesta de Trump es comenzar a despersonalizar al Partido Republicano y a fortalecer la ideología trumpista. Uno de los principales retos de un movimiento político es sobrevivir a la falta física o política de su líder; si no existen cuadros lo suficientemente formados para captar el voto de la población, entonces, habrá una crisis de identidad que se expandirá al partido político. Desde 2015 los republicanos optaron por personalizar su oferta política en Trump; tras la derrota de 2020 esto no cambió y en 2024 esto se ha repetido.

Vance es la apuesta por un liderazgo joven que podría relevar al expresidente en caso de ganar los comicios del 5 de noviembre. Al parecer el magnate republicano ha leído bien el futuro político; autores como Wright Mills o Gaetano Mosca sostienen que para la subsistencia de una organización, estado o partido debe haber un relevo entre ciertos perfiles para que esta siga funcionando. Vance es un rostro joven de 39 años que dota de vitalidad y juventud la candidatura de Trump.

Las esperanzas de que le trumpismo continué como una ideología latente en el seno de los republicanos no es solo una obsesión política, sino de sumar un corriente política a su instituto político como el reaganismo, el neoconservadurismo, libertarismo o paleoconservadurismo. El trumpismo pretender convertirse no solo en la facción más fuerte, sino la que aglutine partes de las otras ideologías, en consecuencia, pueda volverse más sólida. Sobre todo, porque hay aspirantes que disputan el dominio dentro del partido.

Personajes como el gobernador de Florida Ron DeSantis, la gobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley, cabezas del movimiento anti Trump como Mitt Romney y el Republican Governance Group integrado por legisladores que aspiran a una moderación política. Sin embargo, algunos de ellos como los gobernadores se han unido para apoyar a Trump; mientras que las voces opositoras al magnate han quedado en minoría y han perdido influencia frente a las corrientes que apoyan la radicalización.

Vance podría convertirse en el relevo del trumpismo y con ello inyectarle nuevas propuestas, sin ignorar que su formación como marine, su oposición al aborto en su totalidad y su retórica recalcitrante. Un nuevo rostro del conservadurismo podría ser atractivo para un grosso de la población; claro este planteamiento parte de que triunfen en las elecciones y luego puedan hacer un gobierno que satisfaga a los Estados Unidos.

En conclusión, el desarrollo de Vance a lo largo de la campaña definirá un posible gobierno de Trump. Sin embargo, la apuesta del empresario a corto y mediano plazo es interesante ya que habla de una planeación y consolidación ideológica. Vance es un hombre inteligente que apela a las emociones, las historias de vida y el nacionalismo. Su radicalización podría mover el tablero político, así como a la oposición demócrata a la cual ya ha comenzado a atacar.